Muchas cosas están cambiando en el mundo, que plantean interrogantes con respuesta azarosa. ¿Qué se propone Trump? ¿Qué suerte correrá la derecha radical en Europa? ¿Adónde va la Unión Europea? ¿Las izquierdas, existen todavía?
El presidente filipino Rodrigo Duterte ha abierto una grieta en el entero esquema estratégico estadounidense en el Pacífico. Por ello cabe esperar que en cualquier momento la ira de Washington se abata sobre él.
El año que termina ha visto muchas variantes que expresan mutaciones importantes en la corriente de los asuntos mundiales. No son las menores el resurgimiento ruso y el desastre que está acarreando la restauración neoliberal en América latina.
El año se cierra con un pico de atentados que pueden ser puestos en relación con las modificaciones en el campo de batalla sirio y con la histeria que provocan.
El triunfo de Trump desenmascara la ola de pseudo humanitarismo y mentiras que ha distinguido a la política norteamericana en la era de Obama y Hillary, devolviendo a Estados Unidos su verdadero rostro de potencia agresora.
Michael Flynn, Consejero de Seguridad de Donald Trump.
La incertidumbre corroe no sólo a la política norteamericana sino al universo neoliberal. Y el gobierno argentino es una parte, aunque minúscula, de esta constelación.
El triunfo de Donald Trump en las elecciones casi con seguridad marcará un antes y un después en la política de Estados Unidos. Y, en consecuencia, en la política mundial.
Los riesgos de una conflagración generalizada en medio oriente siguen creciendo. Y la tensión en el área Asia-Pacífico demuestra que la confrontación entre la concepción unipolar y la multipolar del mundo, está en su punto de ebullición.